Argentina al ritmo de Messi, con la cadencia que lo caracteriza, piques cortos, pausas, giros imprevistos, zigzagueos, desesperadamente ansioso por avanzar a su segunda final en Copas del Mundo, y Croacia, empujada por la firmeza, creatividad y capacidad de lucha inclaudicable de Luka Modric. Uno de los dos grandes duelos de Semifinales. Aníbal contra Escipión “El africano” en la memorable batalla de Zama. ¿Qué se puede esperar entre temores, sospechas y atrevimiento? Sin duda, un partido que se estará moviendo entre un oleaje de intrigas. Eso sí, pienso que Croacia tendrá que crecer en agresividad, porque va a necesitar algo más que un disparo al marco para vencer a Argentina. Le bastó eso para tumbar a Brasil, pero con ese antecedente, Croacia no puede jugar al repliegue, esperar algunas opciones y depender de contras con Perisic, Pasalic, Kramaric. Entregarle la iniciativa al equipo argentino equivale a multiplicar dificultades.
Que la defensa croata es más efectiva que la argentina, no es discutible. Sin embargo, la diferencia está en la salida de balón con proyecciones. Los de Scalloni van más por las rayas, Croacia se inclina por el centro, pero cuentan con Juranovic que es un cortador de alas a los que atacan por su banda. El gol de Croacia frente a Brasil, fue una entrada rectilinea de Petkovic con remate explosivo, imparable. El recuerdo está fresco: Modric avanzó desde atrás manteniéndose en sintonía con el desplazamiento de Vlasic por la izquierda. El cauteloso retroceso de Brasil concediendo espacios facilitó acercarse sin marca, y el pase rasante hacia el centro, que Petkovic define, completamente libre empatando el juego 1-1. Visto eso, Argentina tiene que presionar moviéndose hacia la pelota y también a los hombres cercanos a quien la maneja, forzando si es necesario, un juego friccionado, realmente un estorbo. Se dice que Croacia le impuso condiciones a Brasil. No vi eso cuando se producen 11 disparos contra tu cabaña.
Dos arqueros competentes, con reflejos adecuados a las exigencias de lo inesperado, buena ubicación, mejor saliendo Livakovic que “Dibu” Martínez, pueden convertirse en factores, quitando estimulos para el cañoneo largo…Mas poblada Croacia en el medio campo, fabrica confusión, lo que desarticula planes, y hace que el contrario se refugie en la improvisación. Brasil tuvo posibilidades pero careció de precisión…Modric es de los que considera, que cortando conexiones con Messi, las progresiones argentinas decrecerán, en tanto él va a disponer de más terreno para extenderse y es un maestro en las entregas largas…Croacia debe tomar riesgos midiendo la contención y el funcionamento defensivo de Argentina. Si tendrá que abrirse, pero lo hizo Inglaterra frente a Francia con determinación y consiguió mantenerse amenazante. ¿Quién prevalecerá en el duelo Messi-Modric? El resultado entre ellos como factores de incidencia, será clave. Considero que Argentina, más flexible, puede salir con el puño en alto. ¡Ojalá!