Esto es tan dificil como establecer ¿cuál es el mejor show que podemos ver en Las Vegas?. Celine Dion en el Cesar Palace, el Circo del Sol en el MGM, David Cooperfield en el Bellagio, el Carnaval que se presenta en el Hotel Río.

¿Hay alguna duda sobre el impacto provocado por el excepcional y posiblemente irrepetible nadador estadounidense Michael Pelphs?. La pileta olímpica en Beijing todavía está hirviendo. Ocho medallas de oro con siete marcas mundiales rodeado de tantos retadores con un nivel de competencia fieramente amenazante. Phelps fue el hombre de las ocho columnas día tras día durante ocho semanas.

Usain Bolt se vio tan elevado como la Torre Eiffel en Paris. La forma como ganó sus tres oros en 100 y 200 metros, agregando el relevo 4 por 100, hace pensar que pasarán muchos años en el firmamento olímpico para que veamos tambalearse los 9.69 y 19.30 segundos, asi como el nuevo registro de 37.10 en el relevo. Las marcas de Bolt, sin ser tantas, pueden ser más duraderas que las de Phelps.

¡Diablos!. China, dominando los juegos con 51 medallas de oro, deslumbrando en Gimnasia, mostrando su avance en casi todas las disciplinas. Este ha sido el más grande golpe de efecto colectivo de todos los tiempos.

Incansables, imparables. Las “locomotoras” de Etiopía. Kenenisa Bekele y Tirunesh Dibaba, fueron los rotundos ganadores del oro en las devastadoras pruebas de 5 y 10 mil metros. El y ella, mostraron el poderío de Etiopía en las distancias largas. Bekele pudo intentar emular a Zatopek corriendo el maratón, pero no lo intentó porque el clima era calcinante.

Costó creerlo.Ver a la rusa Yelena Isinbayeva entre las nubes para gabar el Salto con pértiga con una altura de 5.05 metros, fue impresionante. La versión femenina de Sergei Bubka se robó el show mostrando esa superioridad aplastante.

¿Lo vieron?. Al brasileño César Cielo Filho, asombroso ganador de oro y bronce en 50 y 100 metros libres. Entre los más rápidos tiburones del planeta, Cielo Filho gritó ¡aparténse!, y se zambulló hacia lo grandioso.

¿Quién ganó?. En los 100 metros mariposa, con Phelps atrapando la atención del mundo, el serbio Milroad Cavic estuvo a punto de arruinarlo todo. Sus manos extendidas estaban por tocar la pared sumergidas, mientras los brazos de Phelps se movían como aspas por arriba. Tuve la impresión que Cavic ganaba, pero lo electrónico, que no falla, dijo Phelps, y se salvó la proeza.

¡Qué pistolero! El destructivo zurdo español Rafael Nadal terminó con la oposición con la autoridad de un sherif como Wyatt Earp, soplando el humo de su pistola. El nuevo número uno del mundo dejó un réguero de “cadaveres” al otro lado de la red.

¡Claro, esos si son ellos!. Después del desastre en Atenas, los del Dream Team de la NBA se reivindicaron en Beijing. Con excepción del dificil juego que les planteó España en la final por el oro, ofrecieron un espectaculo de magia que los aproximó mucho a la tropa de Jordan, Magic y Bird en 1992.

No hay duda. Argentina tiene suficiente futbol para pelear titulos en cualquier categoría del futbol mundial, y en estos Juegos, con la genialidad de Messi y los aportes de Agüero, Gago, Masherano, Riquelme y DiMaría, golearon a Brasil y liquidaron a Nigeria para retener el oro olímpico.

Korea, invencible en beisbol. Se esperaba una final Cuba-Estados Unidos como en Sidney, pero el pitcheo koreano y su bateo oportuno, no dieron chance a nadie. En forma invicta, venciendo dos veces a Cuba 7-4 y 3-2, el equipo de Korea se coronó en el último torneo de beisbol que veremos en unos Olímpicos.

¿Algo más?. No puedo olvidar a la veterana nadadora Dara Torres perder por una centésima de segundo, la medalla de oro en los 50 metros libres frente a la alemana Britta Steffen, ni el accionar del gimnasta chino Wei Xiang ganador de tres medallas.