TICOS SE EXCEDEN

Con un hombre menos desde el minuto 67, el nica Duarte por doble falta, el equipo de Costa Rica aguantó embestidas, no pudo evitar el empate 1-1, utilizó pulmones extras en el alargue, y acertando cinco penales, avanzó a cuartos de final saltando sobre Grecia

Sólo los más audaces soñadores podían vislumbrar la presencia de Costa Rica en los cuartos de final de ésta Copa del Mundo, después de haber expuesto la vida en el Grupo de la Muerte, fajándose sin carnet de mayoría de edad con tres ganadores de Copas, Italia, Inglaterra y Uruguay. Pero los ticos lo han logrado, dejando atrás a Grecia, imponiéndose en la definición por penales 5-3 con un alarde de agallas, batallando con un hombre menos desde el minuto 67, con 53 pendientes, imaginando poder embotellar su sudor cada cinco minutos y recibir la transfusión de sangre necesaria para no flaquear en busca de la hazaña.

MOMENTO MÁGICO

Costa Rica vive hoy un momento mágico, y lo ha fabricado a pulso y con corazón, mostrando futbol, crecimiento y un empeño admirable. Ha firmado algo más que una proeza. Cuando Umaña clavó el quinto penal, Costa Rica entera, y seguramente el resto de Centroámerica, sintió que la montaña había sido escalada. Desde 1990, nueve equipos del vecindario de la CONCACAF, atravesaron la fase de grupos, pero sólo Estados Unidos en el 2002, vencido 1-0 por Alemania, se extendió a cuartos. Y ahora lo consigue ésta Costa Rica que se apareció en Brasil espada en mano, impulsada por una llamativa osadía, y la cuota suficiente de talento para producir buenos juegos.

ESTOCADA DE RUIZ

El gol de Bryan Ruiz en el minuto 52, se produce precisamente cuando Grecia, entre lo rocoso de su futbol, atravesaba por un buen momento. Un buen trazo de Cristian Bolaños y el remate un poco “tartamudeante” de Ruiz, metiéndose junto al poste derecho. El 1-0 hinchó a Costa Rica. El duelo continuó angustioso y extenuante con Grecia llegando más y el formidable arquero Keylor Navas, agigantándose frente a las exigencias, cada vez mayores. El sueño de dar el otro paso, sufrió un golpe cuando el nicaragüense Duarte, en el minuto 67, frena con falta a Holebas. La segunda tarjeta amarilla, determina su salida y Costa Rica queda “amputada” con 10 hombres.

EMPATE CONTRA RELOJ

Después de la cuchillada de Sokratis que forzó el empate 1-1 a los 91, mientras el suspenso se alargaba hasta los 120, Grecia se adelantó, consiguió espacios como era de esperarse, y hasta encontró caminos hacia la cabaña de Navas. Costa Rica, por deshidratarse, peleaba con sus reservas de bravura, y permanecía atenta a la posibilidad de algún escape de Campbell. Como apretaba los cuellos la incertidumbre, y el peligro de un error mortal. Navas resolvió todos los problemas frustrando a los griegos redondeando una estupenda actuación, y el 1-1 se mantuvo firme, como las paredes del Coliseo romano.

Y por segundo día seguido en estos octavos, llegó la hora de los penales, lo más conveniente para Costa Rica por ventaja en el arquero, contra el misterio de los tiradores griegos.

EL DUELO DE PISTOLEROS

Abrió Celso Borges, fulminante, a la derecha de Karnezis, adelantando a Costa Rica 1-0; equilibra Mitroglou, con un acercamiento lento y sinuoso al balón, desorientando a Navas, 1-1; Bryan Ruiz, sereno y mortífero, suelta un taponazo con zurda que hace girar sobre la nada a Karnezis. Costa Rica 2-1; responde Lazarosi con una diagonal bien trazada a la derecha, estableciendo el 2-2; González recupera la ventaja tica 3-2 con un proyectil al centro que toma a Karnezis moviéndose a la izquierda; empata 3-3 Holebase, a la izquierda de Navas, que se siente desarmado; Campbell con frialdad pese a estar resoplando, inutiliza a Karnezis y adelanta otra vez a Costa Rica 4-3; luego, el momento crucial, Navas, contorsionándose espectacularmente abofetea el disparo de Gekas y lo desvía sobre la cabaña; si Umaña acierta, no hay más allá, y lo logra con un arponazo eliminando a Grecia y asegurando para Costa Rica un boleto al paraíso de los cuartos. Aquí lo festejamos.