CUESTA CREERLO

El Mundial de Rusia sin Alemania desde muy temprano. Eso era imposible de imaginar, hasta que México y Corea se encargaron de golpear las consideraciones brutalmente. Perdiendo 0-2 con Corea, el equipo alemán fue “decapitado” ayer, como Italia en 2010 y España en 2014. El futbol sangra. 

Si cayó el imperio romano ¿por qué escandalizarnos con el derrumbe de Alemania en esta Copa del Mundo? Ningún poderoso, por muy firme que parezca, está seguro. Finalmente, cae, y es lo que le ocurrió a la tropa de Joachim Low, borrada de éste Mundial con toda su constelación de estrellas, por Corea del Sur, y el gran accionar de su flexible arquero de vivísimos reflejos Jo Hyeon-Woo, capaz hasta de impedir la entrada de un zancudo encapuchado en su cabaña. “Tuvimos suficientes oportunidades” dijo un abatido Mats Hummels, quién en el minuto 87, casi quiebra el hielo. El desesperante 0-0, que también eliminaba a Alemania por la resonante victoria 3-0 de Suecia sobre México, golpeando su cielito lindo y haciéndolo llorar,  se mantuvo inalterable durante 93 minutos. Una vez más, la agitación hizo su aparición en tiempo de compensación. La secuencia que produjo el gol de Kim Young-Gwon fue muy rápida y el árbitro señaló sin titubear un fuera de juego, El reclamo coreano obligó a la revisión por el VAR, y la decisión fue corregida. Young-Gwon estaba habilitado, así que Corea se colocaba en ventaja 1-0 con tres minutos pendientes. La sensación de impotencia, carcome. Un gol como el de Kroos no bastaba, se necesitaban dos contra reloj, pero en lugar de eso, aprovechando que hasta el arquero Neuer estaba volcado buscando como contribuir, una contra coreana, le permitió a Son Heung Min en el minuto 95, correr solo detrás del balón hasta llegar a la cabaña vacía y marcar el 2-0.

SEIS “DECAPITAMIENTOS”

Por tercera Copa consecutiva, y sexta en la historia, el Campeón defensor, quedaba eliminado en la fase de grupos. En el 2010 naufragó Italia de Pirlo, DeRossi, Gatusso, Cannavaro, Chiellini y DiNatale, empatando con Paraguay y Nueva Zelanda antes de perder con Eslovaquia; en el 2014, el súbito hundimiento fue de España, goleada 5-1 por Holanda y doblegada 2-0 por Chile, antes del inútil triunfo 3-0 sobre Australia; y ahora, le ocurre a ese gigante que siempre ha sido Alemania, derrotada 1-0 por México, salvada frente a Suecia por un disparo fantástico de Kroos en el último instante, y sepultada por éste ágil y atrevido equipo coreano con el marcador adverso de 0-2, considerado impensable antes de ponerse en marcha el torneo…¿Qué es lo que pasa? Se habla de la maldición de los campeones, lo que considero una tontería. Alemania ganó sus 10 juegos en la fase clasificatoria para estar en Rusia. Casi es señalado como favorito en forma unánime, pese a las advertencias del restaurado Brasil, España y Francia…Hay otros tres derrumbes inmediatos de campeones defensores: Italia en 1950, con otro formato, fue vencida por Suecia, y aunque superó a Paraguay, no avanzó a la segunda etapa; en Inglaterra 1966, el flamante Brasil ganador de dos Copas seguidas, con Pelé lesionado ausente en un juego y cojeante en el último, fue eliminado por Hungría y Portugal; y en el 2002, otro campeón resplandeciente, Francia, ni siquiera anotó gol en tres juegos.

ES SORPRENDENTE

¿Cómo imaginar que un equipo tan bien armado, con cada pieza en el lugar correcto de su engranaje, con una capacidad de funcionamiento largamente exhibida, además, sin duda el más temido, terminaría liquidado con su reputación hecha jirones? No, eso no entraba en los cálculos de nadie, y pese a las dificultades atravesadas en los dos primeros juegos convirtiendo en descartables a Khedira y Ozil, mirando sospechosamente a Timo Werner, necesitando urgentemente de Mario Gómez, decepcionándose de Julian Draxler, preocupándose por la forzada pérdida de Jerome Boateng, se creyó que venciendo a Corea del Sur, el equipo germano tenía una gran posibilidad de sobrevivir en un probable triple empate que no se dio…No es el fin como se pensó de Brasil después de la caótica derrota por 1-7 precisamente ante Alemania hace cuatro años. Puede ser el fin de Low porque alguien tiene que ser el responsable de un fracaso aunque todos estén tratando de huir, pero el equipo ha mostrado a sus juveniles, y también a los jugadores en crecimiento. Los hemos visto en los Olímpicos de Río y en la última Confederaciones. Sin embargo el impacto del golpe, es parecido al que asestó Juan Manuel Marquez a Manny Pacaquiao. La salida de Alemania golpea la Copa, pero como siempre, el torneo es más grande que cualquier imprevisto por muy “marca” Titanic que sea. Ahí están todavía Messi y Cristiano, y también Brasil con Neymar, Francia y España. Es decir mucho que ver.